“Nuestra primera clase – Observación desde la previa a la escuela”
¿Miedos, incertidumbres, ansiedad?
Hoy es mi cumpleaños 03 de Junio, empiezo a pensar que son
hoy las prácticas para mí. En mi nuevo comienzo, en mi nueva vuelta al sol. Sin
dudas hay un antes y un después.
Vivo en el B° “Santa Lucía” de Paraná. Me tomo un colectivo
a diario para ir a cursar, para ir a la clase en la que soy auxiliar, para
observar en la escuela secundaria o como hoy para hacer mis prácticas.
Al principio de la cursada pensé que no iba a poder hacer
la materia, vivía en otro lado y no me podían pagar mis viejos, la situación
económica en mi casa no está bien, viajaba para cursar desde mi ciudad de
origen: Villaguay. Sin embargo, hice lo imposible para llegar hasta estas
instancias y encontrar un lugar para quedarme.
Hoy estoy a solo 8 km de la Esc. Secundaria n° 57 “Dr.
Mariano Moreno”, estoy por tomar el colectivo n° 15 de la empresa ERSA, me deja
a tres cuadras de la escuela. Estoy esperando, veía que uno venía a lo lejos,
levanté mi brazo y no paró en mi garita. Así continuaban varios colectivos,
ninguno me permitía subir. Llena de nervios y al ver que solo faltaba 1 hora
para las prácticas, decidí tomarme un remís. El día estaba hermoso por suerte.
Llegué a la escuela. Saludo a la secretaria y paso al salón
donde estaban mis compañeras de prácticas con el Ing. Comas preparando todo para
la exposición, faltaba media hora para que empecemos la clase. En ese momento
empezamos a despejar dudas sobre lo que sería
nuestra primera práctica. Sofía había conseguido una cámara para sacar
fotos, yo había llevado mi notebook, es viejita pero funciona con el proyector
de la escuela. Preparamos todo con gran entusiasmo.
Toca la campana para que salgan al recreo, nosotros
estábamos en el salón, era hora de movernos hacia el aula, para preparar
imágenes, parlantes, la otra pc de Rosa y la música para la dinámica. (Teníamos
10 minutos para preparar el aula, antes de que los alumnos volvieran a
ingresar).
Llegó la hora de las prácticas, a las 16, el portero tocó
la campana.
Esperamos en el hall a la profesora que nos habilitó el
espacio, mientras los alumnos ingresaban al aula, cuando llegó la saludamos e
ingresamos todas al aula.
Comenzó la clase, primero nos volvimos a presentar,
contamos que teníamos un proyecto para realizar y reiteramos a que materias
implicaba para que ellos tengan en cuenta que no solo nos iban a ver aquí en
Tecnología.
La clase comienza dándola Rosa, pero todas intervenimos en
la clase, ya que el proyecto es entre las 3.
Al principio la dinámica, en esta idea de solicitar que se
paren y conformen una ronda, fue un poco difícil, ya que los alumnos tienen y
tenían pre concepciones a cerca de lo
que involucra pasar al frente, pararse, compartir un espacio y tiempo con sus
compañeros.
Algunos de los alumnos no quisieron hacer la dinámica,
incluso se separaron de la ronda. Así es que, en vez de obligarlos a disponer
su cuerpo de algo que no querían realizar, decidimos que ellos se aparten pero
que estén atentos a mirar la dinámica y, una vez que vieron que no era al
“malo”, que la profe de tecnología también participaba, decidieron volver y
participar en la ronda. Hay que destacar que aparte de la dinámica que teníamos
pensada, algunos alumnos se sintieron a gusto con la música por lo que hasta se
animaron a dar unos pasos de baile mientras iban participando. Veíamos como se
divertían y jugaban al ritmo de la música de “La bicicleta” de Carlos Vives y
Shakira.
Una vez realizada la dinámica, se hizo la instrucción
correspondiente a lo que sería sacar la fotografía y presentar la impresión en
3D. Cabe destacar que costó sacar la fotografía, si bien teníamos permisos de
los padres, algunos chicos no estaban a gusto con la misma, no se sentían
cómodos, por lo que no podíamos obligarlos a sacarse la foto en el patio.
Después de sacar la fotografía al grupo, Sofía le llevó la cámara al Ing. Comas
para que este pasara la foto a la impresora en 3D. Mientras el resto de las
practicantes, con la docente de tecnología y los alumnos retomamos al aula, y
seguíamos mostrando imágenes de lo que podía llegar a imprimir la impresora. Ya
en el aula, presentamos los cuadernos bitácoras, en los cuales ellos iban a ir
anotando y dibujando durante el proyecto según lo que corresponda a la clase.
Una vez terminada la introducción de lo que trataba una
impresora en 3D, invitamos a la docente Antonella y a los alumnos a pasar al
salón para tener una charla y la demostración de la impresora. En ese momento,
los alumnos nos comentaron que se retiraban con nosotros a las 17:20, por tanto
llevaron sus útiles al salón.
La charla fue muy interesante, al principio los alumnos no
tenían confianza para preguntar, pero luego de que el ingeniero propusiera que
podían observar, mover y tocar algunos de los trabajos ya impresos en 3D, los
chicos tenían otra predisposición por lo que se animaron a hacer preguntas y a
anotar en sus cuadernos bitácoras. Cuando menos nos dimos cuenta, la clase pasó
y se terminó el primer día de prácticas cuando a las 17:20 tocaron la campana.
Los alumnos se despidieron, la docente los despidió con una
sonrisa en su cara al ver la propuesta para los alumnos. Los alumnos nos
saludaron y se fueron. Nosotras nos quedamos unos minutos más en la escuela
desarmando los dispositivos tecnológicos para devolver lo correspondiente a la
escuela y el resto guardarlos en nuestras mochilas.
Ø Objetivación:
Pensando en los contextos pedagógicos de la institución
escolar como así también en los alumnos que pertenecen a la escuela, lo saberes
cotidianos que albergan y las posibilidades que nos brindan para poder hacer
nuestras observaciones y prácticas docentes, hago hincapié en la siguiente cita
que la profesora de Sociología de la Educación de la F.H.A.Y.C.S (U.A.D.E.R.),
Mirta Espinosa, realiza sobre la lectura de Nélida Landreani:
“conceptualizar quiere decir, convertir cada tema en un
problema, es cuestionar, es interrogar lo que está pasando y dimensionar sus
consecuencias, como me afecta, como afecta a todos, de qué manera, cuando,
donde, etc.”[1]
¿Qué puedo ver de esta primera clase? Llegué a pensar en lo
que significa que ingresemos a una institución. ¿Qué hicieron las prácticas de
ese día? ¿Marcaron un antes y un después en alguien aparte de mí? ¿Iniciamos
bien las prácticas? Si comenzamos a reflexionar en cuanto a estas preguntas,
podremos decir que todas son parte de la construcción de una nueva realidad,
aunque ya veníamos de las observaciones, ese día que dimos nuestra primera
clase, las realidades que había se modificaron desde: lo social y cultural de
la institución, las acciones y aprendizajes en los alumnos, lo que hacía la
docente en el aula, a nosotras nos modificó como actores principales de aquel
momento.
Por esta razón es que la presencia que hicimos marcó quizás nuevos caminos.
Es necesario que desnaturalicemos la idea de la presencia.
Podemos traer a modo de ejemplo la primera dinámica que realizamos con los
alumnos y en la cual ya estábamos en un rol docente. Si bien al principio no
quisieron exponerse algunos alumnos al juego y rechazaban ese tipo de
actividades en el aula, vemos que este tipo de actividades y nuestra presencia
“al mando del aula” provocó algunas disrupciones y negaciones al principio, que
luego con el paso del tiempo y ver como otros compañeros ponían el cuerpo en la
dinámica, fue cambiando la actitud de aquellos “negados” y comenzaron a
participar de los juegos.
Así, es que ser parte de este tipo de acciones, nos ha
de-construido y reconstruido a todos los sujetos participantes que se
implicaron en ese primer día de prácticas. Retomando aquel momento de la
impresora en 3D Y la invitación al Ing. Comas para que brindara una charla de cómo
funcionaba la maquinaria, los mecanismos que utiliza y que se podría producir
en la misma.
Nuestra presencia implico tiempos y espacios dentro de la
institución escolar, que tuvo sus resonancias dentro de la prácticas venideras,
ya sea desde actitudes que tuvieron los alumnos, la docente que nos brindó sus
horas y nosotras a la hora de actuar ante las situaciones que nos implicarán en
ese contexto escolar como en nuestros futuros trabajos.
“Segunda
clase – Nuevos momentos”
Para este segundo día de prácticas habíamos empezado de
forma más tranquila, si bien existen ansiedades por ser las prácticas, ese
traspaso entre la observación y las prácticas ya lo habíamos realizado. Como la
clase anterior, esperamos a que llegue la docente, ingresamos al aula y saludamos
a los alumnos.
Ese día teníamos planificado generar un espacio de diálogo
con los estudiantes para que ellos puedan construir sus propios conocimientos y
repasar no sólo lo de la clase anterior sino también conceptos dados por las
docentes anteriormente.
En el aula estábamos distribuidos de modo que Rosa
preguntaba a los alumnos, Sofía escribía los aportes de los alumnos en el
pizarrón y yo me encontraba entre los estudiantes para poder ayudar a aquellos
estudiantes que no se animaban a responder.
¿Qué percibía en los diálogos que se iban generando? Había
estudiantes que hablaban y aportaban al
grupo variadas ideas, algunos te decían más de una cosa, otros por vergüenza no
querían decir ni una palabra y después estaban aquellos que hablaban en voz
baja para consultarme si podían hacer algún aporte que se acordaban.
De las preguntas realizadas a los estudiantes, la que más
respondieron o que más tuvo ideas fue la de proponerse pensar que cosas
diseñarían como bienes o servicios en el futuro.
Luego entregamos las bitácoras, para que puedan redactar
como se imaginaban el futuro de la tecnología y la relación con el ser humano.
En este tiempo que ellos debían escribir en sus cuadernos, alguno resolvieron
su consigna rápidamente, pero otros debatían con sus compañeros de banco que
podían escribir. También hay que destacar que en su mayoría no solo
escribieron, sino que dibujaron aquellas ideas escritas.
Ø Objetivación:
En la clase realizada, notamos que nuestros alumnos
estuvieron más desenvueltos a la hora de resolver las preguntas y de hacer la
actividad en el cuaderno bitácora, pero también como dice en la observación,
había algunos alumnos que no se animaban a responder o hablaban con voz muy
baja, al igual que vimos en nuestras observaciones de clase.
De esta forma me planteo ¿Qué es lo que puedo hacer yo en
conjunto con mis compañeras practicantes para poder incluir a estos alumnos en
las dinámicas?
Graciela Frigerio habla de “Fort-da, o lo que pende de un
hilo” como un modo de hacer justicia ante las ausencias, con los recién
llegados, con los que están ahora y con los que están por venir. (2004:27)
Así es que podemos plantear la participación de los alumnos
en las actividades: debemos generar espacios y tiempos donde ellos puedan
desplegar su imaginación y responder a las preguntas que haga el docente o las
practicantes sin temor. Por esta razón se trata de acompañarlos para poder
generar el momento de reflexión y dialogo con el educando.
Igualmente para solucionar el problema de la participación
no solo es cuestión de pensar y llevar el hábito de habilitar la palabra a ese
otro que se nos presenta como alumno. También debemos involucrarnos con el
interés que se presenta por parte de ellos, para generar mayor compromiso y una
participación activa.
Prieto Castillo menciona la “capacidad y la posibilidad de
mediar con toda la cultura”. En este sentido apunta a aquello que ya veníamos planteando
sobre la idea de comunicación y de dar la voz a los alumnos. Pero también nos
invita a ser esos mediadores, porque como docentes debemos estar abiertos a un
horizonte de posibilidades de conocer, entendiendo que no solo se hace desde
los textos o desde la repetición de un tema año tras año. La capacidad de poder
manejar un universo de posibilidades significa “tender puentes entre lo que se
sabe y lo que no se sabe, entre lo vivido y lo por vivir, entre la experiencia
y el futuro”. Esta forma de abordar un tema, nos permite ser los allegados a
los alumnos, porque ese puente que se genera para proporcionar conocimiento, no
es una construcción definitiva. Tanto nosotras practicantes como los alumnos,
estaremos ante re construcción del puente o la construcción de otros para poder
establecer lazos con las capacidades cognitivas que cada uno posee y que no
pertenecen a nadie más.
“Tercera
clase, la salida”
La tercera clase es la salida. Tenemos mucha ansiedad de
que esto suceda, por un lado esperábamos el voto de confianza de los padres
para que dejen salir a sus hijos de la institución hacia el “Paseo de las esculturas”
pero también se sumaba el hecho de que los alumnos se acuerden de traer las
notitas firmadas. Ese día vinieron 11 alumnos.
Revisamos cada cuaderno, solo 1 de los alumnos, no había
traído la notita, por lo que se consultó con los preceptores cómo hacer para
que también pueda hacer la salida con sus compañeros. Por lo que llamaron al
tutor para pedir la autorización de la salida.
En la ida, fuimos muy atentas, Rosa iba adelante, yo y
Sofía íbamos detrás de todos para que
nadie se atrase ni intente irse para otro lado, ya que al lado del patio de las
esculturas esta la plaza del “Patito Sirirí”. Sabíamos perfectamente que era
nuestra responsabilidad y era un gran momento para los alumnos, aunque solo
caminamos dos cuadras y todo quedaba sobre la misma manzana de la escuela.
Cuando llegamos al patio de las esculturas, comenzamos a
recorrerlo, dejamos que primero observen y que luego comiencen a anotar en sus cuadernos bitácoras. En este punto el
cuaderno bitácora es una gran herramienta, ya que ellos escribieron todo lo que
veían. También pudieron apreciar desde el tacto con las obras, que tipo de
materiales se utilizaban, porque unas ya estaban erosionadas y otras no.
En ese paseo, nos encontramos también con unas bases de
metales desechas de la Vieja Usina tiradas a un costado de las esculturas.
Cuando los alumnos vieron esas formas, pensaron que también formaban parte del
conjunto de obras expuestas y anotaban sobre las mismas en las bitácoras.
Luego regresamos a la escuela, si bien pesábamos permanecer
más tiempo en el lugar, el clima frio nos obligó a volver más temprano al
establecimiento y continuar la actividad en el aula.
Para volver a la escuela hicimos el mismo procedimiento de
cuidado de los alumnos, dos atrás y una adelante.
Cuando llegamos al aula, sociabilizamos aquello anotado en
las bitácoras. Fue interesante ver, como hicieron dibujos de las obras, como
redactaron la idea de que materiales las componían y con qué herramientas
podrían haber hecho las esculturas.
Al final de la clase, nos quedaban 10 minutos en los cuales
aprovechamos para que ellos pusieran personalizar sus bitácoras. Nosotras
habíamos llevado diferentes materiales y cada uno podía seleccionar lo que
quería y compartiendo entre todos.
Cuando terminaron las personalizaciones, se tocó el timbre,
guardaron los útiles, limpiaron, los saludamos y nos retiramos del
establecimiento.
Ø Objetivación:
La tercera clase es el día de la salida. Cuando pienso en
la instancia que logramos para los alumnos y para nosotras como practicantes,
se me hace inevitable no traer la palabra “experiencia” a través de los
recursos disponibles en la comunidad para aumentar el conocimiento en los
estudiantes y la comprensión de uno o varios temas. A lo que también hay que
sumar el hecho de usar una bitácora para hacer un registro personal de esas
experiencias a través de: observación, preguntas, palabras, ideas, frases,
dibujos a modo de boceto.
El paseo de las esculturas, está compuesto por producciones
de artistas de diferentes regiones de nuestro planeta. Cada obra propone un
discurso que según el espectador tendría un significado diferente para cada
uno.
“Los objetos artísticos, las imágenes en la/s cultura/s,
aparecen así no como unidades variables y formales, sino como unidades
discursivas abiertas a ser completadas, con otras miradas y, por lo tanto, con
otros significados” (Hernández, F. Educación y Cultura Visual- La investigación
sobre la comprensión: la interpretación como clave de la educación escolar.
1997: 109).
De acuerdo a los registros realizados por los alumnos,
podemos ver que ellos lograron establecer un dialogo con las obras a través de
la realización de bocetos en su mayoría. Pero también aquí tenemos que decir
algo peculiar que sucedió en el paseo. Pues como mencioné en la observación un
grupo de alumnos registró como obra unos desechos de la Vieja Usina, al cual
comparte un patio interno con el Centro Provincial de Convenciones, lugar donde
está emplazado el Paseo de las Esculturas. Los artistas en su mayoría parten de
sus propias experiencias para crear un objeto artístico. Por eso las
experiencias que se estaban gestando en los alumnos a través de las obras en
observación provocaron que ellos relacionen los materiales desechables de
algunas obras emplazadas con los materiales desechados por la Vieja Usina. De
esta forma vemos, como cambian las concepciones sobre lo que es o no una obra
de Arte. Si bien, se consideró como un buen registro del pase, cuando se volvió
a la escuela se aclaró que eso era un elemento desechado por la otra
institución.
“Una ética de la responsabilidad se preocupa por la
consecuencia de los actos y por la manera en que podemos hacernos presentes en
lo que sigue y hacernos garantes de otros actos, y por la palabra; actos que no
son necesariamente faltas ni errores, sino iniciativas, inicios que exigen
continuación. En la Educación Hannah Arendt ve una responsabilidad seguida por
el conocimiento, es decir, por la venida al mundo de los recién llegados, lo
cual entraña, según ella misma lo dice, una doble responsabilidad: la
responsabilidad de y por el pasado que podía verse arruinado por la ignorancia
en razón de la llegada de los nuevos. Pero responsabilidad por la
responsabilidad por esa novedad venidera, que puede ser destruida por la dureza
de aquellos que ya están, por su reticencia a darles cabida, por su fuerza o
impaciencia” (Cornu, Laurence. Transmisión e Institución del sujeto:
Transmisión simbólica, sucesión, finitud. 2004:35)
De acuerdo a las
observaciones de los alumnos, se puede decir y asumir las responsabilidades al
encontrarnos con situaciones y actuar ante las circunstancias, mencionando la
diferencias entre aquellos que sí eran producciones artísticas y lo que no era
una producción perteneciente al Paseo de las Esculturas. Como futuros docentes
es puntual que atendamos a estos hechos, aclarando las situaciones de una
manera que contribuya a expandir sus experiencias para la creación de nuevos
sentidos.
“Cuarto
clase, continuamos”
Hoy es la cuarta clase, la clase la da mi compañera Sofía.
Estamos muy contentas en cómo ha avanzado el proyecto.
Hoy trabajamos el alambre, la docente de Artes Visuales
faltó y solo teníamos para trabajar 40
minutos para realizar la clase, de esta forma cambiamos de lugar las clases, ya
que ésta actividad estaba pensada para la quinta clase. Como los alumnos
estaban atentos, consideramos que la dinámica pensada para ese día podría darse
en otra clase ya que necesitábamos el proyecto y eso acortaba los tiempos.
Esta clase fue muy productiva, los alumnos hicieron
variadas formas con el alambre, comprendieron que hay distintas formas de hace
producciones de Artes Visuales. Cuando Sofía explicó la actividad fue algo
novedoso, aunque algunos levantaron las manos y dijeron que veían videos de
“youtubers” en YouTube. No era la primera vez que escuchábamos ese comentario,
sabíamos que ellos estaban muy familiarizados con esa plataforma.
El hecho de trabajar con pinzas y compartirlas, no fue un problema.
Se agruparon de 4 o de a 2 según la afinidad e hicieron todos la actividad. Recorríamos
el aula para ver sus avances, ayudarlos y despejar dudas de la actividad.
Trabajar con líneas en la tridimension, con el alambre y con las pinzas fue
novedoso, dejaron de ver esos materiales como algo relacionado solo a
determinadas situaciones de refacción.
Los Trabajos finales fueron muy interesantes cuando los
iban exponiendo. Luego los guardamos dentro de los cuadernos bitácoras,
limpiamos el aula, guardaron sus útiles y nos despedimos de ellos ya que había
tocado la campana.
Ø Objetivación:
En la cuarta clase, trato de cómo resolver un problema
temporario para que no afecte a nuestras prácticas docentes y por ende al
proyecto. Esto se debe a que en la cuarta clase se ausentó la docente de Artes
y se elaboró un plan de trabajo acorde al tiempo disponible y a lo planificado.
“El aula así concebida, ámbito institucional de realización
de la clase cómo propuesta pedagógica, adquiere connotaciones particulares
derivadas de la cultura institucional. Es el territorio en el que los sujetos
sienten que se habilitan posibilidades para el despliegue de lo singular. Se
torna lugar de pertenencia y, por tanto, se lo habilita placenteramente o
refracta mecánicamente signos de rutinización, de estrechamiento en la
expresión de lo diverso, de formalización de las prácticas cotidianas que
alberga” (Edelstein, Gloria. Formar y Formarse en la enseñanza: Formar y
formarse en el análisis de las prácticas de la enseñanza. 2011:191).
De acuerdo a
Eldestein es interesante pensar en las prácticas de la enseñanza en relación a
los propósitos que exigen una organización de las planificaciones. Pero… ¿qué
sucede cuando acontecen situaciones que no están previstas de ningún modo en la
planificación de ese día de clases? A pesar de no estar explícitamente
mencionado, pueden sucedernos situaciones fuera de lo habitual, que implicarían
la toma de decisiones incorporando herramientas conceptuales y metodológicas
que me habiliten analizar y tomar decisiones para actuar conforme a lo que se
planifica.
“La iniciación en la
práctica de la enseñanza tendría su fuerza y su poder movilizador en la medida
en que lo que allí se pone en juego es una demanda de hacerse cargo de las
diferencias, reconocerse así mismo en ese lugar de encuentro, donde se trata de
construir una posición, la de docente- practicante, que no puede eludir las
múltiples demandas de estos ‘otros’, que son en definitiva quienes terminarán
por legitimarlo a partir del reconocimiento que le otorguen” (Edelstein Gloria.
Imágenes e Imaginación – Iniciación en la docencia: Los sujetos de las
prácticas. 2011:39)
La decisión que tomamos con mis pares practicantes para
optimizar el tiempo debido a que faltaba una docente, es reflejo de una doble
circunstancia: por un lado ser estudiantes de un profesorado y por el otro
hacer nuestras prácticas docentes.
Cómo menciona Edelstein, las prácticas son un desafío a la
imaginación y ante esa situación vimos un desafío a la capacidad de resolver
una situación que ameritaba no solo el trabajo en conjunto que ya veníamos
realizando, sino también la capacidad de decidir en un corto plazo de tiempo.
“Quinta
Clase, dinámica de Sofía y Power point”
Hoy es la quinta clase de nuestro proyecto. Fuimos a buscar el proyector y como los alumnos no
habían tenido clases en el horario anterior. Ingresamos 10 minutos antes al
aula y armamos todo, lo probamos y andaban bien, pero cuando llegó la hora de dar la
clase (previo al saludo de los alumnos), la pc dejó de andar, se había des
configurado. La otra pc que teníamos no aceptaba el proyector. Por lo tanto
hasta que solucionáramos el tema, decidimos un recorrido por todo el proceso
que ya veníamos haciendo junto a los alumnos, recordando conceptos y nombres,
los cuales anotamos en el pizarrón.
Cuando anduvo la pc, decidimos mostrar las imágenes y videos
que teníamos pensado pasar al final de la clase y dejar la dinámica para lo
último.
Reconozco que los primeros 25 minutos de la clase, fueron
un poco “desordenados”, por lo que es esencial que siempre se tengan los
archivos en diferentes formatos para poder plantear la clase como se planifica.
En la dinámica, tuvimos muy buena respuestas por parte de
los alumnos. Algunos no se animaban a pasar al frente o a dar pistas sobre la
palabra que les había tocado pero luego de ver a sus compañeros y amigos todo
participaron.
Debemos tener en cuenta que en ninguna clase, tenemos la
totalidad de los alumnos, mayormente llegamos a tener 11, pero eso ha ido
variando, hay alumnos que no van a la escuela desde Mayo cuando realizábamos
nuestras observaciones.
Ø Objetivación:
“Cuando
algo no funciona”
El equipo de prácticas pensaba en el proyector para las
prácticas de secundario como así también el uso de otros aparatos tecnológicos.
Para nosotras usar proyector de imágenes implicaba una funcionalidad para la
enseñanza y para el aprendizaje, es decir, nos apoyábamos en una herramienta
eficaz a la hora de contribuir en las clases.
En cuanto a la manipulación del equipo en la clase, todo
andaba bien hasta 10 minutos antes de comenzar la quita clase de prácticas,
pero en ese transcurso de espera la computadora se comenzó a actualizar
automáticamente. De este modo se vio obstaculizada la muestra de videos e
imágenes que teníamos para mostrar a los alumnos. Por segunda vez consecutiva
teníamos desafíos al comenzar la clase.
“…la confianza es una interrogación acerca de las
oportunidades ofrecidas al azar, de la responsabilidad, es la garantía de la
oportunidad que aún es solo posible, pero que se hace existir en el acto de
reconocerla.
Es preferible hablar de eficiencia y no de eficacia: no nos
encontramos con una técnica aplicable, con causes y efectos linealmente
ordenados. No hay método ni receta para la confianza. La previsibilidad
habitual, es desbaratada. Ya no será posible pensar la educación como acción
eficaz de un ser sobre otro, sino como una relación entre sujeto y sujeto,
capaz de permitir el advenimiento de un nuevo sujeto humano: como hemos visto,
se trata de una acción eficiente… Por ende, habrá necesariamente caminos
indirectos renunciamientos a ‘un poder sobre’, confianza instituyente” (Cornu
Laurence. Capítulo 2: Responsabilidad, experiencia, confianza. 2002:77-78)
Con respecto a la confianza y a lo que ya veníamos
planteando sobre las dificultades con las que nos hallamos en clase seguidas,
es importante pensar sobre todo en los vínculos que se generaron a la hora de
tomar decisiones. De la clase anterior ya sabemos cómo se resolvió y que eso no
afectó de forma negativa sobre nuestra planificación ni los alumnos. Pero en
esta clase ocurrió, algo imprevisible pero que sabíamos que podía pasar. De
esta forma nos tomamos 2 minutos y resolvimos que poder realizar para acompañar
adecuadamente a nuestra compañera Sofía quien estaba a cargo de la clase ese
día. Por lo tanto rápidamente hablamos
con ella y decidimos continuar con esa clase. Si bien los primeros 25 minutos
fueron un poco desordenados, Sofía pudo dar su clase, primero hizo una dinámica
y luego pudimos proyectar las imágenes que teníamos pensadas para el comienzo.
Sofía aunque tenía miedo, confió en que nosotros íbamos a arreglar la
computadora para proyectar y al quinta clase salió bien para las tres.
“Sexta
Clase: BasureArte”
La dinámica fue divertida para los alumnos, todos
participaron, pero en vez de hacer una medialuna prefirieron quedarse en la
formación de sus bancos y participar todos. Todos levantaban las manos para
participar y todos aportaron al juego. Mis pares practicantes Rosa y Sofía, me
ayudaron a ir poniendo las vinchas., también realizaban sus aportes. Por lo que se había generado un clima de
intercambio muy interesante, a diferencia de otras clases parecía que los
conocíamos desde primer año. Creo que eso fue muy gratificante para todos,
porque la docente de tecnología siempre nos acompañaba con las dinámicas que
armábamos para los chicos.
Una vez que todos pudieron participar, yo les pregunté a
los alumnos que artículos se imaginaban con esos materiales o que otros
materiales se podrían usar para los artículos. Cómo había variadas respuestas,
se invitó a que anotaran todas aquellas ideas en sus bitácoras. Ya que a medida
que uno iba preguntando, también se anotaban en el pizarrón para que todos
pudieran tenerlas en sus bitácoras después. Una idea que anoté de los jóvenes la
cual destaco por su importancia ecológica, es “la realización de muebles para
las aulas a partir de materiales reciclables como el plástico o el aluminio de
las latitas de bebidas”.
A continuación se prendió el proyector, que por suerte en
esta clase anduvo bien.
En esta segunda parte de la clase, primero realicé una
introducción del tema y el contenido de la clase, expliqué a quién íbamos a
ver. Cuando ellos iban viendo los videos, vi gestos de sorpresa al observar con
qué estaban realizadas las obras de Tom Deiniger. Para retomar el video, se
visualizaron algunas fotos que hacían zoom de las obras del video. A partir de
allí ellos comenzaron a ver con mayor claridad los materiales utilizados y
fueron anotando en sus bitácoras.
Al final de la clase, entregamos una nota donde decía que
materiales y herramientas deberían traer para realizar un trabajo en la próxima
clase, leímos la nota y luego se finalizó la clase.
Ø Objetivación:
En la sexta clase, planteamos nuevas formas de hacer arte o
producciones artísticas, la cual está estrechamente relacionada con lo que se
venía planteando de la tridimensión. Por lo cual iniciamos con mis compañeras
practicantes, una dinámica para introducir a los alumnos, en el tema
nuevamente, en esta primera parte, hubo una participación total de los alumnos,
ya que todos decidieron participar desde el comienzo de la dinámica:
“… los proyectos de trabajo apuntan hacia una manera de
representar el conocimiento escolar basada en el aprendizaje de la
interpretación de la realidad, orientada hacia el establecimiento de relaciones
entre la vida de los alumnos y profesores y el conocimiento que las
disciplinas… y otros saberes que no disciplinares. Todo ello para favorecer el
desarrollo de estrategias y competencias de indagación, interpretación y
presentación del proceso seguido al estudiar un tema o un problema, que por su
complejidad favorece el mejor conocimiento a los alumnos y los docentes de sí
mismos y del mundo en el que vinculen”.
(Hernández, F. Educación y Cultura Visual: VIII tres proyectos de
trabajo para la comprensión de la cultura visual. 1997: 195)
De esta forma planteo que la dinámica realizada favoreció
el modo de vinculación entre los alumnos y el conocimiento, ya que luego de la
misma, ellos pudieron responder algunas preguntas que realizamos. También se
plantearon formas de ayudar al medioambiente a través de la creación de muebles
reciclados para las aulas. Por lo tanto, se puede observar que sí funciona
habilitar el diálogo e intercambio entre alumnos, practicantes y docentes, lo
cual aumenta las posibilidades de compromiso con las actividades.
Así planteamos un aula donde el alumno no es un sujeto
pasivo, un receptor de contenidos. Por lo contrario, se proponen actividades
donde el alumno sea sujeto activo y portador de su propia voz. En este sentido
los alumnos tienen una autonomía y responsabilidad ante ellos mismos.
“Séptima
clase: grandes construcciones”
En el comienzo de la clase, retomamos el concepto de
tridimensión, de construcción y lo que habíamos visto en la clase anterior. Los alumnos recordaban algunos conceptos y
otros no, por lo que recordábamos las características, por ejemplo en la
tridimensión dábamos ejemplos con nuestros cuerpos.
A continuación se solicitó que diseñaran la tridimensión
que realizarían a modo de boceto en sus bitácoras. Ellos fueron pensando y fueron observando que
materiales podrían utilizar, aunque aún no habíamos solicitado que pongan los
materiales sobre la mesa, notamos que a medida que iban terminando sus diseños
intercambiaban materiales con otros compañeros.
Cuando llegó la hora de armar sus diseños, estaban muy
comprometidos con el trabajo, se veía que estaban atentos a las
recomendaciones, incluso algunos propusieron trabajar en equipo de dos de
acuerdo a lo que tenían pensado hacer. Con respecto al trabajo en dúo, estuvimos
de acuerdo ya que estaban trabajando bien, veíamos como probaban materiales e
intercambiaban opiniones de forma respetable y responsable.
Con respecto al tiempo que utilizaban para la producción,
fuimos muy cuidadosas, ya que estábamos controlando el horario, esto no quiere
decir que los apurábamos a terminar. Lo utilizábamos al control del tiempo por
una cuestión de organización, donde ellos luego de terminar o en su proceso de
finalización de los trabajos debían contar y exponer que habían realizado con
sus palabras. A su vez, si bien estaban trabajando cada uno en su mesa, era
importante que al final de la clase pudieran limpiar y ordenar.
Ø Objetivación:
Al principio de la clase se retoman los saberes que veníamos trabajando en las actividades anteriores.
En el diálogo que se produjo con los alumnos, observábamos que recordaban las
clases y los conceptos, a la vez que nosotras les brindábamos alguna ayuda si
se olvidaban de alguna palabra necesaria o precisa.
La forma en que organizamos esta clase, nos permitió
construir un discurso en el cual generamos una actitud de compromiso y
responsabilidad por parte de los alumnos, como ya hemos planteado en otra
objetivación anterior. De esta forma se generaron puentes cognitivos para conectar
con la actividad de ese día.
“Toda interpretación es una representación mediante
símbolos de una concepción de algo. Cada nueva contribución cultural supone una
nueva concepción y una respuesta a alguna o todas las representaciones
anteriores. Esto nos lleva a considerar
que, por ejemplo, un artista simplemente parte de una experiencia propia,
reconstrucción de una teoría ajena y la versión personalizada de la misma”
(Hernández, F. Educación y Cultura Visual. Capítulo V, La investigación sobre
la comprensión: la interpretación como clave de la educación escolar.
1997:131).
En el proceso de realización del boceto previo a la
tridimensión, observamos que algunos podían participar en equipos, establecer
vínculos y buscar propuestas. Los alumnos quieren participar, proponen las
ideas y escuchan atentamente.
“Para prevenir formas de violencia y excusión, físicas y
culturales, es importante construir una significativa producción estética
(ética a la misma vez) como instrumento de integración intercultural y social.
Las capacidades creativas de transformación personal y social donde lo
imaginario, lo lúdico y el placer estético, se tornan posibles” (Abad Javier.
Experiencia estética y arte de
participación: juego símbolo y celebración. Introducción.2007)
Propongo este fragmento de Abad para dar cuenta acerca de
la actividad realizada para llegar a hacer una tridimensión. Los alumnos a
través de la guía que le brindamos las tres practicantes, propusieron algunos
parámetros para realizar la producción. De esta manera observamos como al
principio de la clase, solo era una actividad más y desde la mitad de la clase
en adelante se vio un mayor compromiso en sus trabajos, ya que la actividad
partía de lo lúdico, el juego y la participación de los jóvenes en la creación de una producción artística.
“Octava
clase: un buen final”
“Ha llegado el momento de terminar nuestras prácticas en
secundario, me he preguntado: ¿cómo nos habrá ido?
La noche antes de las prácticas, pienso en esta clase que
se viene, lo que hemos planificado, si los alumnos participarán, que el clima
acompañe…
Llega el día de las clase, un rato antes de marchar a tomar
el cole, práctico en mi casa las cosas que voy a decir, que me podrían
responder los alumnos, las reacciones que van a tener cuando vean todo lo que hemos
preparado con Rosa y Sofía. Me miro en la foto sacada en el patio aquella
primera clase, pienso en lo orgullosa que estoy de todo lo que hemos logrado en
conjunto con mis dos compañeras del trio pedagógico.
Cerca del medio día me voy a la parada del colectivo con
todos los objetos que debía llevar, el cole pasó a horario, llego a la escuela
y me encuentro en la puerta con Rosa y Sofía, esperamos a que salgan los
alumnos de primaria que concurren a la mañana y luego pudimos entrar a las 12:30
teníamos 40 min para preparar todo antes de que llegaran los estudiantes.
Cuando comenzaron a llegar los chicos algunos habían traído
jugo y galletitas para compartir, querían dejar dentro del aula pero decidimos
que las dejaran afuera sobre un banco
así podían ir a formar y saludar al director.
Y a la vuelta del saludo, entraron al aula y vieron la sorpresa. A medida que iban ingresando vieron que el
aula, estaba decorada con fotos de las clases, con un proyector en el cual
pasábamos videos, con un árbol de donde colgaban sus trabajos en alambre, con
una mesa central donde estaban sus construcciones y dos mesas laterales: 1 contenía sus
bitácoras y otra contenía jugos, tortas que habíamos llevado para compartir con
ellos al final de la clase.
Cuando comenzó la clase, los saludamos y explicábamos que
era nuestro último día de prácticas con ellos. A continuación miramos unas
fotos en un video, donde estaban ellos realizando los diferentes trabajos e
iban comentando que era lo que habían realizado, algunos tenían vergüenza de
verse en fotos por lo tanto adelantábamos el video para respetarlos. Aunque
después se fueron animando como pasaba en otras clases y dejaron que el video
se reproduzca. Para destacar, estaban muy contentos con sus trabajos en
tridimensión, lo que destacaron fue el trabajo de líneas con alambre y luego la
construcción, con sus palabras expresaron la comodidad que sintieron con esos
materiales y se imaginaban otras producciones más si hubieran sucedido más
clases. Y creo que de eso se trataba, de dar a conocer nuevas formas de
producción
Al final de la clase, compartimos una merienda para
despedirnos, en ese momento dijimos unas palabras alentando a que sigan
estudiando, a que sean responsables como fueron con nosotros.
Ø Objetivaciones:
La octava clase es el último día de prácticas, el cual fue
un momento muy importante y especial para nosotras las tres practicantes,
docentes de T.A.E., docente de Tecnología y alumnos. Por esta razón se preparó el aula de 2do “B”
con todos los trabajos realizados durante este trayecto.
Esta exposición en el aula demostró la
interdisciplinariedad, que habíamos
pensado para nuestro proyecto, lo cual fue muy importante para que nuestros
alumnos puedan apropiarse el conocimiento a través de diversas experiencias y
actividades entre las asignaturas de tecnología y Artes Visuales, Jorge Steiman
hace el siguiente aporte sobre la organización interdisciplinar:
“…implica un marco general en el que cada una de las
disciplinas en contacto pierden sus propias fronteras, confundiendo en una
integración tal que se ven modificadas las terminologías específicas de cada
una de ellas, sus metodologías de estudio/investigación, sus conceptos etc. ‘la
enseñanza basada en la interdisciplinariedad tienen un gran poder estructurante
ya que los conceptos, marcos teóricos, procedimientos, etc. a los que se
encuentra el alumnados se encuentran organizados en torno a redes globales, a
estructuras conceptuales y metodologías compartidas por varias disciplinas.
Además tiene la ventaja de que después incluso es más fácil realizar
transferencias de los aprendizajes así adquiridos a otros campos
tradicionales’... (2008:4)
. La forma de disponer todos los trabajos en el aula, está
estrechamente relacionado con las experiencias de las practicantes a la hora de
proponer nuestras producciones artísticas dentro y fuera de la universidad
“Una situación de comunicación rica en comunicabilidad nos
muestra grupos trabajando con seriedad y alegría, propuestas que, incluso,
pueden llevar a discrepar con la postura del educador, intercambio de voces y
experiencias, materiales traídos para sostener una argumentación, vida, en
definitiva, un aula viva en la cual todos se sientes constructores del
ambiente, de las relaciones y de sí mismos” (Prieto castillo. Comunicación con el educador. P: 99)
Si bien al principio de la clase algunos sentían
“vergüenza” de verse en la exposición ya que había una proyección de
fotografías de los alumnos trabajando. Luego a medida que iban señalando fotos y contaban sus experiencias en relación
a las clases, comenzamos a ver que estas acciones alentaban a los que no se
animaban a hablar. Desde el equipo de prácticas terminamos bien, ya que aunque
parecía difícil un trio pedagógico, resolvimos juntas todas las dificultades
que nos surgieron. Fuimos un gran equipo.
Al final de la clase compartimos algo de comer y beber que
habíamos llevado para los alumnos y despedimos a los estudiantes y la docente
que nos brindó el espacio, muy satisfechas de todos los logros junto a ellos.
Proyecto de Nivel Medio:
https://drive.google.com/file/d/1tqihYVzXAY4091zu8TXixQGovuCLVTy4/view?usp=sharing
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